jueves, 27 de marzo de 2014

No tiene titulo


Son pocos los que son honestos y más con sus sentimientos:
entonces, cuando están tristes, dicen: “estoy cansado”
Y si los llama la ira: “sólo estoy enfadado”
Confunden amor con encanto;
Y si se los lleva el carajo:
 “no tengo nada, estoy agobiado”
se preocupan por envidia y se enojan en los altos.
Y cuando están tranquilos,
piensan que es felicidad.
No se ríen de lo gracioso,
pero sí por quedar bien,
Es raro ver que alguien diga: “hoy tengo mucha energía”
y más raro todavía: “Me siento con mucha vida”
Confunden odio con enojo,
y dan golpes a lo loco,
para luego a cucharadas:
comerse del plato el llanto.
Se cierran a la tristeza, creyendo que es fortaleza.
Y en relación con el otro, lo mejor es cuidar el trato.
Total que no digo nada y que me lleve la chingada…

No hay comentarios:

Publicar un comentario