lunes, 17 de mayo de 2010

Menesteres

Es preciso no duplicarse
ser sin volverse
hacerse todo sin repetirse.

Aprenderé el método
haciéndolo breve
cómo es.

Así sobre tres líneas
recogidas tantas letras
palabras repletas.

jueves, 13 de mayo de 2010

Y me falta abuela

Esto de las enfermedades no deja nada bueno.
Hoy hice una propuesta y salió avante. A veces da gusto.
Voy a regalar unos libros.
Espero tener suerte mañana en la noche.
Me pesa el alma y tengo ganas de crecer.

Mamá Coco gracias por todo.

jueves, 6 de mayo de 2010

Modernizarse


Ahora que sigo de duelo, con esa alegría y con ese afán de no desilusionar al ejemplo, me he puesto a pensar en aquellas cosas que me faltan por completar para ser mejor ser humano (eso de ser mejor persona es diferente)

Y bueno debiendo partir por la definición de humano. Misma que me tocará encontrar, ya que no vale nada de lo que he estudiado de antropología, filosofía, ética o moral.


En el trabajo hay gente que no va a trabajar y vive feliz de la vida.

En la calle hay gente que no respeta los reglamentos ni las leyes de tránisto y están felices de la vida.

En el mundo hay terroristas, contrabandistas y demás bribones que viven felices de la vida.

Entonces ¿qué es realmente ser humano?

¿Estará la definición del bien y mal realmente inscrita en nuestro ADN?


Necesito releer mis notas de filosofía.

También tengo que retomar la lectura de HP Phenomenon.


Hoy fue un día largo de trabajo.

No me olvidaré de escribir.


miércoles, 5 de mayo de 2010

Morir sonriendo


Con profunda tristeza pero también con cierta alegría me toca hoy escribir de un amigo que se fue. Por fortuna yo no elegí su amistad, sino que en su generosidad él me permitió contarme en su amplio círculo de relaciones. Ya han pasado más de 16 años desde que nos conocimos y aunque el trato no fue frecuente, la calidad del mismo me hizo ver el talante de su personalidad. Sin distingos y a pesar de la gran diferencia de intelectos, me trataba como su igual y me mostró una preocupación real por mi persona y por mi vida. Si hoy me duele su partida, es más por el hecho de no haber tenido la oportunidad de despedirme que el hecho de saber que no contaremos más con su inteligencia sencilla. Doctor, mi admiración por usted es la misma de aquella primavera y mi agradecimiento
es de por vida.
Apenas la semana pasada, pensaba escribirle una carta, así de puño y letra, no un correo electrónico en el que se pierde el sentido de las palabras y que en ocasiones es frío, quería de ese modo hacer un mensaje personal, cordial así como fue siempre nuestra amistad. Ya me encontraba emocionado de poder contarle de mi nueva vida profesional y de los otros cambios que se han estado dando en mi situación particular... quería, como en otras ocasiones, escuchar el consejo preciso y adecuado, que fuera mi guía en este caminar que apenas inicio. Que me diera el mensaje apropiado que pudiera guardar en mi memoria para siempre y así no defraudar a nadie, cumpliendo cabalmente con lo que me toca hacer; así como usted lo hizo siempre.
Si ya para mi, usted era un ejemplo, hoy es por demás decirle que mi admiración será devoción y, en honor a lo que creo, me encomendaré a Dios a través suyo (ya lo he estado haciendo).
Refrendo mi compromiso de convertirme en un hombre de bien, responsable en todos los sentidos y llevar a todos un poco de la paz y sencillez que usted siempre me transmitió.
Una palabra no es nada, y hoy no tengo palabras precisas para describir mi experiencia y las ganas que tengo de contarles a todos que nos tratamos con confianza. A pesar de la distancia y a pesar de los pesares, siempre guardaré celosamente todos sus consejos.
Enfrentarse a la muerte de alguien especial en nuestras vidas, siempre nos remueve las ideas y los sentimientos, en este caso estoy tranquilo y espero tener de nuevo la oportunidad de estrechar su mano y recibir de usted un abrazo.
Seguiré su consejo y no dejaré de escribir... para morir como seguramente usted se fue... sonriendo.
Gracias Doctor,
con todo aprecio y admiración
su amigo
Mariano



martes, 4 de mayo de 2010

Instante


Lo decidí:

moriré justo después de verte,

sin dejar visos a la imaginación

y rondando apenas los 40.

así, muerto, estaré frío y sin alma,

acompañado sólo de tu amor y tu sonrisa clara.


Y en silencio, te podré decir que te quise hasta mi muerte;

para que entonces un instante dure eternamente.


domingo, 2 de mayo de 2010

Nadie va a al cielo si no lo acompañan todos


realmente estamos solos

sin dónde, sin para qué.

ahí donde el dolor se calla,

permanece suelto el amanecer.


justo debajo del placer,

apenas encendido de la cama,

esta esa nada que se duele

todo por el vacío.


de dónde hay un para qué.

no importa ya el silencio

más vale la llama que enciendo

cuando te dejo de ver.


y si no siempre anochece,

es por el renacer

que surge noche tras noche

cuando el alma sale a beber...